Tras la resaca de los puentes, y una vez recuperados de la locura que significó para nosotros el Día de las Tiendas de Discos, en donde además de formar parte de la coordinación y comunicación tuvimos nuestra parcela de programación en el Café Molar, nos permitimos hacer unas cuantas valoraciones. Para nosotros, aun cayendo en plena Semana Santa -recordemos que la fecha es internacional y emplazada al tercer sábado de abril-, el Día de las Tiendas de Discos fue un pequeño gran éxito, no sólo de afluencia y repercusión mediática, sino de ventas.
Y esto es muy importante, la proliferación de pequeños espacios en los que parte de su actividad económica provenga de la venta de discos, como lo es cualquier otra iniciativa que incentive la profesionalización y generación de fuentes de ingresos dentro del maltrecho sector en que nos movemos, el cultural, concretamente el más maltrecho aún si cabe, el musical. Es por ello que, para nuestro trabajo es una gran recompensa el hecho de que tantos y tantos medios volcaran su mirada hacia lo que se estaba celebrando ese día, que no es otra cosa que el reconocimiento a un negocio que si ha podido escapar de la extinción en España ha sido justamente gracias a la diversificación en sus actividades.
En concreto, el Café Molar, sitio en el cual gestionamos un rincón de vinilos nacionales, es un paradigma perfecto: un café-librería-tienda de discos con gusto exquisito y mimo por el detalle en el que discurren charlas, presentaciones, acústicos y demás eventos culturales sin cesar, muchos de ellos gratuitos, y en el que, fruto de esta efervescencia, confluyen bajo un mismo techo creadores y promotores independientes de distintos ámbitos culturales. Al final, las actividades de estos pequeños espacios se integran con esfuerzo en el entramado del circuito independiente y lo enriquecen. Si hace falta un día para que los medios en masa vuelquen su mirada hacia ello, pues tendremos que afianzar dicho día porque, directa o indirectamente, salimos todos beneficiados de ello.
Resumen repercusión general en prensa
Se vendieron bastantes discos, muchísimos más que un día cualquiera. Junto al tirón de las ediciones especiales -nosotros colaboramos con la coedición junto a nuestra franquicia barcelonesa, la tienda de discos Ultra-Local Records y nuestros asociados del Café Molar- muchos curiosos aprovecharon los descansos de los conciertos programados (de manera gratuita, agradecimiento a la implicación de las bandas y sellos involucrados) para husmear y picotear.
En cuanto a las actividades que preparamos para ese día, comenzamos el día previo con la inauguración de una exposición muy especial, “Del Sur al Cha-Cha-Cha”, donde Manu Puñonrostro exponía 60 bolsas de tiendas de discos de sitios diferentes del mundo de su colección. Reino Unido, Francia, Israel, Estados Unidos… y España, como no, se veían representadas en diferentes tamaños y colores. Respecto a esta última, no negaremos que el recorrido era bastante nostálgico por la cantidad de tiendas desaparecidas, pero al mismo tiempo y de algún modo ilusionante por la perduración de otras e incluso la aparición de algunas nuevas, caso de Flexidiscos en Valencia.
Del Sur al Cha Cha Cha, una expo de bolsas de tiendas de discos. Fotografía de Sergio Escalante
Respecto a los conciertos programados para ese día, contamos con la inestimable colaboración de tres bandas punteras como Incendios (grupo paralelo a Atención Tsunami), M A J E S T A D, el nuevo proyecto electrónico de Pepo Márquez (The Secret Society), presentando su nuevo trabajo: “Música Para Pelear” (Club Social, 2014) y Univers, aprovechando que bajaban el día antes a presentar su nuevo disco, “L’Estat Natural” (Famélic, 2014). Los tres grupos rallaron a gran altura en formato semi adaptado al entorno y la connivencia de los vecinos permitió que la celebración de este día tuviera un broche perfecto.
Atención Tsunami, M A J E S T A D y Univers desde el mostrador del Café Molar, por Antonio-Diniz Almeida